En las primeras visitas, al colmenar en Febrero o Marzo en función de la climatología, es cuando vamos tomando las decisiones de que hacer con cada colmena, según veamos su estado y devolución.
En estas visitas, alimentaremos, periódicamente, y mas intensamente si llegan días de lluvia o fríos que impidan trabajar con normalidad a las pecoreadoras.
Limpiaremos, pisos, cambiaremos cajas deterioradas, para pintarlas y repararlas. Quitaremos cuadros viejos y con pólenes mohosos. Reordenaremos la colmena, colocando la cría en el centro y colocando en los entornos cuadros con miel, rayando los panales para que les sea mas accesible.
Las colmenas mas potentes las marcaremos para potenciarlas especialmente para dedicarlas a la cría de reinas, de las que sacaremos las reinas para hacer núcleos.
Las colmenas que veamos que tienen una reina vieja o débil, las controlaremos y decidiremos si cambiarles la reina.
En estas visitas observaremos, si la cría tiene alguna enfermedad como pueden se Loques, micosis, polillas, varroas. Que trataremos cuanto antes para evitar que luego sea tarde.
Cuando veamos que la cría en el panal no es homogenea, es decir, que parece una coladera, porque la cría está mezclada de difentes edades, tenemos que pensar que tiene alguna enfermedad o que la reina es vieja. Si la reina es vieja, sin mas miramientos la buscamos y la matamos, para que esta colmena a partir de ese momento, la consideremos un núcleo mas. Poniendo en marcha la cría de reina, que controlaremos después de alimentarla, un mes mas tarde para comprobar que tiene reina y que ha empezado a poner.
La formación de enjambres. El momento óptimo para la formación de enjambres, es cuando la colmena tiene como mínimo 6 cuadros de cría, y cuando haya una floración abundante como puede ser a partir de los almendros, y en lo posible con unas previsiones meteorológicas favorables.
Procedimiento: de las colmenas que previamente habíamos seleccionado como candidatas, buscaremos la reina, junto con 4 cuadros, dos de miel y polen que colocaremos en los laterales del núcleo y 2 de cría, asegurando que colocamos cría en las tres fases: de recién puesta, a punto de opercular y sellada, junto con todas las abejas que van en los cuadros y entre uno de los cuadros de miel-polen y el de cría podemos poner un cuadro vació, con cera amarilla y celdas de obrera (en su defecto, una lamina sin estirar). Incluso podemos sacudir las abejas de otro cuadro sobre estos.
La cerraremos, dejando ventilación, y la desplazaremos a otro colmenar, en lo posible a 2 Km. de distancia para evitar que las abejas vuelvan a la colmena madre.
Una semana mas tarde la observaremos y si el cuadro vació que le metimos, lo tiene lleno de cría, pasaremos todos los cuadros a una colmena, colocándola en el mismo lugar que tenemos el núcleo. Colocando los cuadros en la misma posición que estaban en el núcleo, y metiendo un nuevo cuadro o lamina, si estiran en la misma posición que la anterior. Alimentaremos para potenciarla, y así sucesivamente hasta que esté toda la colmena llena. Que será el momento de montar un alza.
La colmena madre, automáticamente al faltarle la reina pondrá en marcha una cria de reinas, de la que, a los 12 dias de quitarle la reina, podremos sacar realeras para otros enjambres. Cortando las realeras para injertarlas en otro panal de un nucleo huerfano o colocando el panal de la realera en el nucleo.
Hay varias formas de proceder con la colmena madre. 1- dejarla evolucionar con la nueva reina sin mas, para la producción de miel. 2- dividirla en 2 ó 3 nucleos colocandolos en el mismo emplazamiento en forma semicircular (abanico). Para seguir su evolución y incrementar el colmenar o en los meses de maxima mielada cerrar el abanico juntandolas de nuevo. 3- utilizar los cuadros con realeras para la formación de otros nucleos.
Cualquiera que sea el metodo que utilicemos, cada semana seguiremos su evolucion y los alimentaremos para potenciar su desarrollo, hasta que tengan 6 cuadros de cria.
En estas visitas, alimentaremos, periódicamente, y mas intensamente si llegan días de lluvia o fríos que impidan trabajar con normalidad a las pecoreadoras.
Limpiaremos, pisos, cambiaremos cajas deterioradas, para pintarlas y repararlas. Quitaremos cuadros viejos y con pólenes mohosos. Reordenaremos la colmena, colocando la cría en el centro y colocando en los entornos cuadros con miel, rayando los panales para que les sea mas accesible.
Las colmenas mas potentes las marcaremos para potenciarlas especialmente para dedicarlas a la cría de reinas, de las que sacaremos las reinas para hacer núcleos.
Las colmenas que veamos que tienen una reina vieja o débil, las controlaremos y decidiremos si cambiarles la reina.
En estas visitas observaremos, si la cría tiene alguna enfermedad como pueden se Loques, micosis, polillas, varroas. Que trataremos cuanto antes para evitar que luego sea tarde.
Cuando veamos que la cría en el panal no es homogenea, es decir, que parece una coladera, porque la cría está mezclada de difentes edades, tenemos que pensar que tiene alguna enfermedad o que la reina es vieja. Si la reina es vieja, sin mas miramientos la buscamos y la matamos, para que esta colmena a partir de ese momento, la consideremos un núcleo mas. Poniendo en marcha la cría de reina, que controlaremos después de alimentarla, un mes mas tarde para comprobar que tiene reina y que ha empezado a poner.
La formación de enjambres. El momento óptimo para la formación de enjambres, es cuando la colmena tiene como mínimo 6 cuadros de cría, y cuando haya una floración abundante como puede ser a partir de los almendros, y en lo posible con unas previsiones meteorológicas favorables.
Procedimiento: de las colmenas que previamente habíamos seleccionado como candidatas, buscaremos la reina, junto con 4 cuadros, dos de miel y polen que colocaremos en los laterales del núcleo y 2 de cría, asegurando que colocamos cría en las tres fases: de recién puesta, a punto de opercular y sellada, junto con todas las abejas que van en los cuadros y entre uno de los cuadros de miel-polen y el de cría podemos poner un cuadro vació, con cera amarilla y celdas de obrera (en su defecto, una lamina sin estirar). Incluso podemos sacudir las abejas de otro cuadro sobre estos.
La cerraremos, dejando ventilación, y la desplazaremos a otro colmenar, en lo posible a 2 Km. de distancia para evitar que las abejas vuelvan a la colmena madre.
Una semana mas tarde la observaremos y si el cuadro vació que le metimos, lo tiene lleno de cría, pasaremos todos los cuadros a una colmena, colocándola en el mismo lugar que tenemos el núcleo. Colocando los cuadros en la misma posición que estaban en el núcleo, y metiendo un nuevo cuadro o lamina, si estiran en la misma posición que la anterior. Alimentaremos para potenciarla, y así sucesivamente hasta que esté toda la colmena llena. Que será el momento de montar un alza.
La colmena madre, automáticamente al faltarle la reina pondrá en marcha una cria de reinas, de la que, a los 12 dias de quitarle la reina, podremos sacar realeras para otros enjambres. Cortando las realeras para injertarlas en otro panal de un nucleo huerfano o colocando el panal de la realera en el nucleo.
Hay varias formas de proceder con la colmena madre. 1- dejarla evolucionar con la nueva reina sin mas, para la producción de miel. 2- dividirla en 2 ó 3 nucleos colocandolos en el mismo emplazamiento en forma semicircular (abanico). Para seguir su evolución y incrementar el colmenar o en los meses de maxima mielada cerrar el abanico juntandolas de nuevo. 3- utilizar los cuadros con realeras para la formación de otros nucleos.
Cualquiera que sea el metodo que utilicemos, cada semana seguiremos su evolucion y los alimentaremos para potenciar su desarrollo, hasta que tengan 6 cuadros de cria.
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